Los datos dicen que en España hay 22,5 millones de compradores online. La llegada del invierno y sobre todo del Covid-19 ha supuesto una revolución sin precedentes en la manera en la que interactuamos con nuestro entorno, alterando nuestras rutinas. Durante este tiempo hemos ido adquiriendo nuevos hábitos a la hora de llenar la despensa, el despegue de la compra de alimentos online, principalmente entre las generaciones más jóvenes, pone de manifiesto un cambio sustancial.
Los datos son abrumadores, y casi la mitad de la población realiza ya compras online. Hasta no hace mucho, comprar alimentos en Internet no era lo más normal. Internet parecía acotado para otro tipo de productos.
Más tiempo en casa, mayor compra de alimentos online
Si algo ha cambiado en cada uno de nosotros en este atípico 2020 es que todos hemos pasado más tiempo en casa. Y eso ha hecho que un 72% de la población internauta de entre 16 y 70 años suela realizar compras online en mayor o menor medida.
Durante este periodo inicial las venta de algunos ingredientes como la harina registraron un importante repunte. Comprar alimentos online se convirtió en todo un fenómeno en un momento en el que hubo una fiebre sin precedentes por cocinar en casa y por alimentarse adecuadamente.
La industria de la alimentación se ha visto en la necesidad de adaptarse a un consumidor que compra más desde casa y que evita acudir al establecimiento para realizar la compra. Aunque la mayoría de usuarios combinan la compra online con la física hay un dato que es abrumador: un 23% de los usuarios compra bienes y servicios de forma exclusivamente online.
Regreso a lo tradicional y a los sabores de siempre
La pandemia también ha hecho florecer un sentimiento de nostalgia por los sabores de toda la vida, por las comidas que preparaba la abuela o la madre, por la casa del pueblo en la que nos reuníamos toda la familia y que nos trae de vuelta nuestra infancia…
Con el invierno a la puerta de la esquina y en unos meses en los que quedarse en casa resulta el mejor antídoto para combatir la propagación del virus, parece la ocasión perfecta para saborear unos mantecados al calor de la estufa o disfrutando desde la ventana de las vistas de la ciudad. Y es que en este retorno a lo tradicional los dulces tienen un hueco especial…
Vuelta a la naturaleza y ¿al pueblo?
La pandemia también nos ha hecho replantearnos nuestra relación con la naturaleza. Durante los primeras semanas todos presenciamos, como si de una película se tratara, las calles de las ciudades semi vacías y liberadas del tráfico, como si el mundo se hubiera tomado un respiro.
La naturaleza ha recobrado su brillo y con él nuestras ganas de disfrutarla. Una vuelta a la esencia de lo tradicional, a los sabores que desprenden los hornos de los pueblos, al olor a pan recién horneado, al aroma de las pastas y dulces tradicionales…
Nos alimentamos mejor y nos cuidamos más
Estar en casa es sinónimo de comer más y en algunas ocasiones, peor. A veces se evita cocinar en casa y mucha gente se decanta por comprar comida online de una manera bastante habitual, una solución rápida pero que puede resultar la menos saludable.
Sin embargo, durante los últimos años hemos visto como en la sociedad en general hay una tendencia a cuidar al máximo la alimentación y complementarla con el ejercicios físico de manera habitual, una preocupación por la alimentación que ha aumentado en el último medio año.
Quizá ahora que estamos tanto tiempo en casa sea el momento indicado para disfrutar con moderación de esos dulces que tanto nos gustan. En una de las anteriores entradas ya os indicamos una lista de dulces sanos y saludables que podéis disfrutar desde hoy mismo, ahora que buena parte de nuestro tiempo libre lo pasamos en casa.